Para muchas poetas, la poesía es su contacto con el mundo y una manera de entenderlo. Un espacio donde la palabra nos acurruca, nos aconseja y nos acompaña en un autodescubrimiento; este mundo, estos mundos, se van dibujando poco a poco hasta que la poeta obtiene respuestas y muchas preguntas. Pero sobre todo, consciencia de sí misma.
Un gran pez pidió salir de mi garganta es ese estadio próximo al entendimiento de sí misma que Cristina Márquez nos comparte.
En estos poemas hay una necesidad de nombrar quién es, qué la ha formado, quiénes son sus musas, sus inspiraciones, sus luchas, qué poetas malditas le han hablado, qué familia ha perdido y qué desamores se han ido para convertirse en leña del fuego que la mantiene viva. Una poesía que nombra los dolores y que celebra las victorias sobre ellos.
Este libro es un proceso íntimo del que Márquez nos hace parte y nos permite ver una vulnerabilidad propia de aquellas poetas que no se detienen hasta encontrarse y encontrarnos, pero sobre todo hasta reafirmar que independientemente de lo que sienta, siempre será lo que escribe.
Alejandra Arévalo
@soy_sputnik
Los poemas que componen Un gran pez pidió salir de mi garganta atraviesan la cuerpa. Con sus imágenes poéticas, Cristina Márquez nos invita a un paseo por diversos climas, escenarios, olores, colores, sabores y sentimientos, que en conjunto y por separado, nos presentan a una poeta que se reconoce a sí misma, sus procesos emocionales y el viaje que ha recorrido para nombrarse. En sus versos, además, se encuentra con otras poetas que dialogan con ella y con su poesía.
Mientras te adentras en su mundo, donde su vida se transforma en metáfora escrita, vas conociendo a la poeta y su historia. Sus momentos más importantes se presentan ante ti. Es una hermosa trampa: al mover el dedo, cuando lees entre líneas y quieres saber más, sentir más de sus versos, te das cuenta de que el dedo que señalaba las páginas ¡ya te está señalando a ti!
Un gran pez pidió salir de mi garganta cuenta también la historia de muchas de nosotras. Ese es el hechizo de Cristina.
Nayelli Palacios Valdivia y Xiadani Jacobo
de Poesía de morras
@poesia_de_morras